Resumen de vacaciones (para cuando quiera recordar, para cuando mire atrás).

Escuché esto mientras hacía este recuento.

 Recuerda, sonríe.

Un 'raspao' o 'raspado' colombiano, más específicamente, valluno. Valle del Cauca está lleno de gente cálida y sonriente, Delicioso, muy lindo y bien refrescante. Merecía la foto. Yo estaba muy feliz.

Mi entrada para El Parque del Café (Montenegro, Quindío, Colombia). Con muchas atracciones, uno de los días más felices hasta ahora. Reí a carcajadas, grité de la adrenalina. 

Una sonrisa genuina y en una foto bonita. Cosas que no suceden muy a menudo.

Buga, Valle del Cauca - Colombia. ¡Vaya calor! Pero qué lindas calles.

Un granizado de café en la mismísima tierra del café, y en el Parque Nacional del Café. Sonreí muchísimo.

Aguas termales provenientes de esa cascada. Es muy relajante, limpia la piel precioso, y el camino para llegar allá, increíble. Santa Rosa de Cabal, Risaralda - Colombia.

¡La foto más bonita que tomé en mi paseo por el Eje Cafetero! Un atardecer al estilo del Quindío. Ya quiero volver. La gente es amable, cálida, sonriente. No soy amante del café, pero les queda delicioso. 

Un día después de almorzar en casa de mis tíos. 

Mermelada de mor y café. Una extraña pero deliciosa combinación, es rico para untar en tostadas. Y es que el envase es una adoración.

Mi papá me regaló una manilla preciosa (yo, que no soy de accesorios), la amé. De Salento, Quindío - Colombia.
Catalogado como uno de los pueblos más bonitos del mundo, y lo es.

Mi primer ramo de flores. De hecho, es el segundo (aunque para mí es el primero, porque lo recibí con cariño; el primero fue un arreglo florar que me dieron unos amigos de mis papás cuando me gradué del colegio, pero no eran seres queridos). Mi primer ramo de flores en un parque de Bogotá. Y pienso que los girasoles son las flores más bonitas.